ÉSTE NO ES PAIS PARA VIEJOS
Hace algún tiempo, Esperanza Aguirre sacó de su chistera un nuevo populismo; teatro para mayores los jueves a precios de saldo.Un jueves, realicé un arduo recorrido por la Gran Vía y alrededores.
Hace algún tiempo, Esperanza Aguirre sacó de su chistera un nuevo populismo; teatro para mayores los jueves a precios de saldo.Un jueves, realicé un arduo recorrido por la Gran Vía y alrededores.
NINGUNA FUNCIÓN DE ÉXITO ERA ACCESIBLE A LOS 3 EUROS “esperancinos”.
En las taquillas de “La bella y la bestia” me dijeron sencillamente “no estamos concertados”; en otros teatros con éxitos notables, la taquillera me ofreció a 3 euros entradas para la función de una obra secundaria, en horarios imposibles (mayoritariamente matutinos), pero NUNCA PARA LOS ÉXITOS. No era cierto que los mayores pudieran ir los jueves al teatro pagando tres euros, a menos que les gustase el teatro parroquial o amateur.Chamberí es un barrio de Madrid lleno de viejos. No hay tantos inmigrantes como unas manzanas más arriba, pero lo que sí hay es muchas ofertas de precios rebajados para mayores de sesenta. Incluidos los gimnasios.
En uno de ellos, muy lujoso, llamado "Palestra", los sesentones pagan menos que los jóvenes. PERO NO TIENEN LOS MISMO DERECHOS. Sólo pueden ir en horarios restringidos, casi ridículos. Por lo tanto, no es que cobren menos, sino que dan a los viejos un servicio parcial y muy limitado. O, lo que es mucho peor, reciben trato discriminatorio. Y ese gimnasio no es lo único. Los demás gimnasios hacen lo mismo (lo que seguramente será ilegal), pero hay bastantes cosas (como los viajes) ofertadas a precios bajos para sesentones que son desposeídas de ventajas y comodidades fundamentales.
O SEA: EL DESTINO QUE ESPERA A LOS JUBILADOS NO ES EL DE LA BARATURA, SINO EL DE LA DISCRIMINACIÓN, CONSENTIDA POR EL GOBIERNO
Luis Melero
En uno de ellos, muy lujoso, llamado "Palestra", los sesentones pagan menos que los jóvenes. PERO NO TIENEN LOS MISMO DERECHOS. Sólo pueden ir en horarios restringidos, casi ridículos. Por lo tanto, no es que cobren menos, sino que dan a los viejos un servicio parcial y muy limitado. O, lo que es mucho peor, reciben trato discriminatorio. Y ese gimnasio no es lo único. Los demás gimnasios hacen lo mismo (lo que seguramente será ilegal), pero hay bastantes cosas (como los viajes) ofertadas a precios bajos para sesentones que son desposeídas de ventajas y comodidades fundamentales.
O SEA: EL DESTINO QUE ESPERA A LOS JUBILADOS NO ES EL DE LA BARATURA, SINO EL DE LA DISCRIMINACIÓN, CONSENTIDA POR EL GOBIERNO
Luis Melero