VERDIALES URBANOS
Antiguamente eran dulces
Todas las aguas del mar.
Se bañó una malagueña
Y se volvieron salás.
Concretamente, no consigo entender de qué forma quién o quiénes han desterrado de Málaga los VERDIALES URBANOS que bailábamos en mi juventud. Yo llegué a bailar en concursos nacionales, en un grupo al que perteneció Pepa Flores.
Era un baile muy armónico y muy coral, y bastante sensual, y difería de los verdiales camperos en que se bailaban a coro, acompasado y metrificado.
Supongo que esta pérdida formará parte de afanosa trama del PSOE mandado por sevillanos contra nuestras costumbre y tradiciones. Hemos perdido demasiados claves y nociones malagueñas en las urdimbres de los enemigos despachos del PSOE.
Por si a algún coreógrafo o profesora de baile se le ocurriera que volvamos a bailar verdiales urbanos, les recuerdo dos quintillas:
Caleta y el Limonar
Viva Málaga que tiene,
Y un parque lleno de flores
a la orilla de la mar
donde nacen los amores.
TAMB IÉN:
En Málaga hay una fiesta,
mi madre me va a llevar.
Como yo iré tan compuesta
me sacarán a bailar.
Llevaré las castañuelas.
LO QUE NO PODEMOS ES REALIZAR EL ACTO DE SUMISIÓN
QUE REPRESENTA BAILAR LA MÚSICA QUE NOS TOCAN QUIENES NOS JODEN DESDE HACE 40 AÑOS.
