• Según una biografía, tuvo relaciones con Reagan, Rainiero, Brando y Newman
• También participó en un 'trío' con JFK y Robert Stack
Parecían agotadas las aristas de una vida extraordinaria pero exprimida hasta el extremo. Tras su muerte, biógrafos y cinéfilos de postín vociferaron a los cuatro vientos la obra y milagros de la gata de Hollywood, la mujer de los siete maridos, sin que hubiera lugar para más sorpresas que los entresijos del discurrir amoroso más tormentoso de su vida: Richard Burton.
Pero había mucho más por donde sacarle el jugo a Elizabeth Taylor, una mujer que dejó dicho que nunca había tenido conocimiento carnal de nadie con quien no se hubiera casado pero que al final resultó haber tenido encuentros de altos vuelos, a la altura de la otra gran leyenda femenina de la meca, Marilyn Monroe.
Al parecer, y de acuerdo a una nueva biografía que acaba de ver la luz sobre la actriz de los ojos violetas, como Monroe en su momento, Taylor compartió escenas de cama -privadas, claro está- con el presidente John Fitzgerald Kennedy, con el actor Robert Stack como tercer invitado de una escena de sexo apasionado.
El mandatario logró convencer a la actriz de que se metiera desnuda en la piscina del actor para terminar en un trío amoroso. No fue el único. De acuerdo a los autores de la nueva biografía 'Elizabeth Taylor: There is Nothing Like a Dame', Darwin Porter y Danforth Prince, la leyenda del cine también se entendió en un mismo día con Marlon Brando y Montgomery Cliff, quien se enamoró perdidamente de Taylor durante el rodaje de 'Un lugar en el sol', de George Stevens.
Además, la joven protagonista de 'Mujercitas' logró seducir a Ronald Reagan con sólo 15 años en su intento de conseguir un papel importante. La actriz se presentó en el apartamento de Reagan y acabó en su dormitorio.
'Me hubiera ganado el Oscar con Lolita'
"Pude notar que quería estar conmigo pero estuvo reacio a dar el primer paso", explicó Taylor a unos amigos, según recoge el libro. "Yo me convertí en la agresora. Ojalá que hubieran estado haciendo el casting de Lolita por aquel entonces, porque hubiera podido ganarme el Oscar".
Al final, el que iba a ser presidente de Estados Unidos, no pudo resistirse a los encantos de la 'gata' pese a estar casado en ese momento con la actriz Jane Wyman. "Después de una dura sesión de besos en el sofá, pasamos al dormitorio".
Además de esa escandalosas revelaciones, el nuevo libro sobre la vida de Taylor explica que durante su luna de miel con su primer marido, el heredero del imperio hotelero Nicky Hilton, tuvo un encuentro sexual con el futuro marido de Grace Kelly, el príncipe Rainiero de Mónaco.
Eso no es todo. Taylor tuvo que convivir con las tendencias bisexuales de varios de sus maridos, incluyendo a Burton, que sometió a uno de los esposos de la actriz, Eddie Fisher, "abusado y derrotado", de acuerdo a los relatos descritos en el libro.
Paul Newman, su compañero de reparto en 'La gata sobre el tejado de zinc', trató de consolarla tras la muerte de Mike Todd, su tercer marido, y acabaron en la cama, pese a que Newman se acababa de casar con su gran amor, Joanne Woodward. Taylor, según su nueva biografía, no dejó títere con cabeza.