Se trata de un muchacho que da la impresión de ser únicamente lo que
es: Un joven feliz.
PERO ES MUCHO MÁS.
Además de enamorar con un juego que hace parecer fáciles sus gestas, ha
logrado que todo el pueblo malagueño sienta que hay luz en su oscuridad
Ya soy mayor, y no recuerdo haber visto a mi gente nunca tan solidariamente
emocionada por algo, como lo está con Isco.